Por Guardiana y fotos de la plataforma Tunari sin Fuego (Bolivia)
Lunes 30 de septiembre de 2019.- El fuego empezó ayer alrededor de las 14.30 en el Parque Tunari por el sector de Tirani. Desde la ciudad se podía divisar una gran columna de humo blanco que empezó a inquietar y calentar las redes sociales. Unos preguntaban por qué estaba otra vez ardiendo el pulmón de Cochabamba, otros maldecían a los loteadores y algunos preguntaban por el helicóptero Bambi Bucket que debería ayudar a apagar estos incendios. En la madrugada, las 200 personas que intentaban apagar el fuego ya estaban cansadas. Desde la 01.00 se fueron replegando y a las 05.00 hubo el anuncio de que otras se retiraban para ser reemplazadas.
Quienes somos periodistas nos enteramos de esto en Cochabamba gracias a la existencia de la plataforma virtual llamada Tunari sin Fuego que está en Facebook y, lo más importante, cuenta con un WhatsApp que en el han sido añadidas 252 personas por el administrador Javier Bellott, presidente de los empresarios privados de Cochabamba.
Uno a uno, Bellott fue añadiendo a voluntarios, bomberos, periodistas, fotógrafos de medios y algunas personas más que suelen colaborar en estos casos.
Aún no hay reporte de cuántas hectáreas han sido afectadas; aunque a las 06.00 podía verse de lejos que el incendio continúa.
La población debiera saber lo que allá normalmente pasa. La gente se organiza gracias al WhatsApp mucho mejor y más rápido. Sin embargo, normalmente hay problemas de logística como la falta de transporte para que los voluntarios puedan llegar a los lugares en los que se producen los incendios.
No es el único problema. No es fácil acceder a algunos lugares por tierra. Ahora está sucediendo este problema porque el fuego ha alcanzado zonas no muy accesibles por tierra como la quebrada del río Pintu Mayu que es profunda. Habrá que sumar la falta de agua. Anoche alguien donó cargas del líquido, pero no había quién las transporte. En la madrugada, el problema seguía siendo la falta de cisternas.
El tiempo que voluntarios y bomberos pierden en los incendios por falta de transporte, agua, carros cisterna no es poco. Y el tiempo que se demoran en apagar también es mayor porque la ayuda del helicóptero no suele ser inmediata.
Alimentación para 200 personas
Cuando sucede este tipo de desgracias, las personas que tratan de solucionar el problema deben alimentarse y tomar mucho líquido. Anoche consiguieron una donación de fideos, pero estaban crudos. Se preguntaba quién podría ayudar a cocinarlos. Después apareció la empresa Panchita ofreciendo pollos y preguntó cuántas porciones debían ser preparadas. En seco, le respondieron: 200.
Hoy la población tendrá que estar atenta a las necesidades de voluntarios y bomberos: sandwiches, agua, sales de rehidratación, leche deslactosada, leche condensada. El nuevo lugar de acopio aún no se conoce. Hasta ayer recibieron en la plaza de Cala Cala.
A pesar de toda esa movilización de toda la tarde de ayer, la noche y la madrugada, aún no se ha podido apagar el incendio y no se sabe si existe igual número de personas para el relevo: 200.
Y este no es el primer incendio del mes ni mucho menos. Casi a diario se han venido reportando focos de calor en el Parque Tunari; aunque gracias a la rápida reacción de voluntarios y bomberos no llegan a mayores hasta que se producen grandes como el incendio que aún continúa.
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