Por Guardiana (Bolivia), foto de Agencia de Noticias Fides
Lunes 6 de noviembre de 2023.- Cooperativistas auríferos se movilizan en la ciudad de La Paz y generan tensión con los pueblos indígenas que anticiparon su rechazo rotundo a las intenciones mineras de continuar con sus operaciones en áreas protegidas en el norte de La Paz y exigir la aprobación de un impuesto único del 3,8% por la venta de oro, entre otras demandas. Hacia el mediodía, se informó que una columna de marchistas mineros rodeaba las oficinas del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap).
“No se atrevan a tocar los intereses del pueblo indígena, no se atrevan a atentar contra nuestros derechos porque el movimiento indígena se va a levantar y no va a permitir más vulneraciones”, advirtió el presidente de la Central de Pueblos Indígenas de La Paz (CPILAP), Gonzalo Oliver Terrazas.
Dijo que si los cooperativistas mineros consolidan sus intenciones, la organización que aglutina a 11 pueblos convocará a sus afiliados para evaluar las acciones a realizar y no descartó una marcha para defender los territorios indígenas.
Anunció que los días 10 y 11 de noviembre habrá una reunión sectorial en San Buenaventura, departamento de La Paz, a fin de analizar las acciones necesarias que hagan cumplir la Acción Popular que prohíbe la minería en el norte paceño.
Previamente, la presidenta de la Central de Mujeres Indígenas de Bolivia, Wilma Mendoza, recordó que en un encuentro indígena realizado en Santa Cruz se determinó articular acciones en defensa de los parques nacionales, informó el portal noticioso Sumando Voces.
No a la intimidación
En tanto, la Coordinadora Nacional de Defensa de Territorios Indígenas Originarios Campesinos y Áreas Protegidas de Bolivia (Contiocap) exhortó a la población “a no dejarse intimidar por 80 mil mineros que hoy atemorizan al pueblo, porque los que queremos preservar nuestras áreas protegidas somos millones, más aún ahora que sufrimos una brutal sequía”.
La Contiocap denuncia que ante la toma de la ciudad de La Paz por los mineros para imponer sus exigencias, las fuerzas públicas como la Policía desaparezcan y dejen en el abandono y desprotección a la población que no tiene quién haga respetar su derecho al libre tránsito.
Solicita a los organismos internacionales tomar nota de lo que sucede en Bolivia y que las áreas protegidas están amenazadas por la minería.
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