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Por Guardiana (Bolivia)

Jueves 1° de agosto de 2024.- A pesar de que a los miembros de la OEA les tomó más de 12 horas tratar la crisis venezolana este miércoles, desde las 10 de la mañana hasta las 20.56 de la noche, no pudieron aprobar una resolución de consenso al respecto. Sin embargo, la tendencia de los países presentes en la sesión del Consejo Permanente convocado de manera extraordinaria fue que el presidente Nicolás Maduro debe presentar, a través del órgano electoral correspondiente, las más de 30.000 actas electorales.

La resolución fue sometida a votación. En total, 17 países respaldaron su aprobación: Argentina, Canadá, Chile, Cosa Rica, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Guyana, Haití, Jamaica, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Surinam y Uruguay. Faltaba un solo voto para alcanzar la mayoría necesaria.

En cambio, otros 11 se abstuvieron: Antigua y Barbuda, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Colombia, Dominica, Granada, Honduras, San Cristóbal y Nieves y Santa Lucía. No hubo ni un solo voto en contra y los siguientes países no asistieron a la sesión: Dominica, México, San Vicente y las Granadinas, Trinidad y Tobago, además de Venezuela.

La resolución rechazada tenía cinco puntos y uno de ellos, el segundo, hacía referencia a que el Consejo Nacional Electoral de Venezuela publique "inmediatamente" los resultados de la votación de las elecciones y que se realice una verificación integral de dichas cifras con observadores independientes para garantizar la transparencia, credibilidad y legitimidad de los comicios.

Luego llegó el turno de las argumentaciones de los cancilleres que asistieron a la sesión y de otros que se comunicaron vía virtual.

Entre quienes se opusieron a la aprobación de una resolución que se intentó consensuar desde la mañana de este miércoles y la que supuestamente sólo contenía una oración con la que no todos estaban de acuerdo estuvo Bolivia. Su embajador, Héctor Arce Zaconeta, esgrimió como argumento central el hecho de que Venezuela ya no forma parte de la OEA desde hace años y, por ello, este organismo internacional no tiene por qué pronunciarse sobre lo que allá sucede.

Héctor Arce Zaconeta, embajador de Bolivia ante la OEA.

Las delegaciones de países que ya habían expresado sus dudas con relación a la transparencia del proceso electoral ratificaron sus posiciones, así también lo hicieron las representaciones de aquellos países que dieron su respaldo al gobernante venezolano.

Malestar por Almagro

En otros casos, el rechazo a la aprobación de dicha resolución tuvo que ver con cierto malestar y desacuerdo con el comunicado lanzado un día antes por la Secretaría General de la OEA al mando de Luis Almagro, la que daba por sentado que hubo fraude. Hubo quienes consideraron que tales apreciaciones sin contar aún con pruebas suficientes fue excesiva.

Sin embargo, casi al finalizar la sesión que fue transmitida en vivo se pronunció Luis Almagro, quien después de explicar cómo se generan las actas en el sistema electoral venezolano, preguntó: "¿Cuánto tiempo más y cuántos muertos más necesitan para que aparezcan las actas? Es improcedente, es devastador todo esto para la democracia. Y estos son hechos aunque no nos gusten".

Y fue más allá al anunciar tanto en la reunión como luego en su cuenta de X que la OEA solicitará a la Corte Penal Internacional el arresto de Nicolás Maduro.

"Maduro prometió un baño de sangre, y nos indignó oírlo y más nos indigna ahora que lo está haciendo. Hay premeditación, alevosía, impulso brutal ferocidad, ventaja superior. Es el momento de presentar cargos de imputación y orden de captura por parte de la Corte Penal Internacional @IntlCrimCourt  contra los principales responsables, incluido Maduro".

Luis Almagro en su cuenta de X
Consensos sin resolución

Venezuela siempre fue la manzana de la discordia en la OEA, con la capacidad de encender discursos y poner a esta organización casi a la deriva en algunas ocasiones. A pesar de ello y aunque no lograron aprobar una resolución por consenso, sí hubo un implícito acuerdo en que el pueblo venezolano actuó de manera apropiada cuando fue hasta las urnas para elegir a quien será su próximo Presidente. Sin embargo, el actual Mandatario no puede pretender volver a gobernar ese país si no demuestra primero que fue quien ganó en las urnas y la única forma es exhibiendo todas las actas.

Palabras más, palabras menos, ese fue el mensaje que dejó la reunión de este miércoles.

Texto de la resolución rechazada
  • 1) Reconocer la participación sustancial y pacífica del electorado de Venezuela en las elecciones celebradas el 28 de julio de 2024.
  • 2) Instar al Consejo Nacional Electoral de la República Bolivariana de Venezuela a que publique inmediatamente los resultados de la votación de las elecciones presidenciales a nivel de cada mesa electoral, lo cual es un paso esencial. Y también, como lo han solicitado los actores políticos venezolanos relevantes, se lleve a cabo una verificación integral de los resultados en presencia de organizaciones de observación independientes para garantizar la transparencia, credibilidad y legitimidad de los resultados electorales.
  • 3) Declarar que es una prioridad absoluta salvaguardar los derechos humanos fundamentales en Venezuela, especialmente el derecho de los ciudadanos a manifestarse pacíficamente sin represalias.
  • 4) Resaltar la importancia de proteger y preservar todos los equipos utilizados en el proceso electoral, incluyendo las actas y resultados impresos, a fin de salvaguardar toda la cadena de custodia del proceso de votación.
  • 5) Expresar solidaridad con el pueblo venezolano y compromiso a permanecer atento a la situación en la República Bolivariana de Venezuela, solicitando al Gobierno que garantice la seguridad de las instalaciones diplomáticas y del personal residente en territorio venezolano, incluidas las personas que soliciten asilo en dichas instalaciones, de conformidad con el derecho internacional, y en particular con la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares.

Aunque esta resolución no fue aprobada por falta de un voto, quedó el mensaje de que el Presidente de Venezuela debe demostrar que ganó mediante la presentación de todas las actas en presencia de observadores de la oposición de ese país y de organismos internacionales independientes.

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