0

Al interior nuestro existen energías que nos permiten desarrollar distintas habilidades, especialmente de comunicación no sólo con nuestros semejantes sino con las distintas formas de vida en el universo. La sabiduría chamánica nos habla de una energía azul de la mente, otra de color roja que parte del corazón y finalmente de color amarillo que emerge desde el vientre.

La energía roja emerge desde el corazón, en cada latido, en cada bombeo de la sangre vital que nos inyecta la fuerza necesaria para sentir. Es la energía de los sentimientos, la primera forma de conciencia que tenemos. Antes siquiera de comprender cualquier cosa nuestro cuerpo nos habla del sentir que tiene cada célula de nuestro cuerpo, porque los sentimientos anidan en cada pedazo de piel. Podríamos decir que la energía roja del corazón es nuestro primer cerebro, ya que cualquier cosa que está en la conciencia parte de allí.

La energía amarilla habita en nuestro vientre, es la energía de la intuición y de las sensaciones, es una fuerza primigenia de vitalidad que está relacionada con el origen mismo de la vida. Esta energía despierta nuestro segundo cerebro que está en conexión con las formas de existencia y por eso permite que podamos “pensar” ciertas situaciones desde el estómago. La sensación de escalofríos o las mariposas que sentimos en la barriga están muy relacionadas con esta forma energética. Todo lo que nace de nuestra intuición e instinto está en relación con esa energía amarilla.

Finalmente, con la energía azul que se extiende desde nuestra cabeza podemos llenar nuestro espacio interno de entendimiento, es decir, de la comprensión de lo que son las cosas. No es que sea una energía de la razón porque la racionalidad está en todas las formas de existencia, no es únicamente mental. Existe una razón universal que es la que da orden a todo el universo, ésta se manifiesta en cada semilla que se convierte en flor o en el vapor que se transforma en agua. La energía azul nos permitirá comprender nuestros propios pensamientos y, a la vez, comprender las distintas manifestaciones del mundo.

El proceso de respiración habitual que tenemos casi inconscientemente en cada instante de nuestra vida inicia siempre con los sentimientos que parten del corazón, nada se hace sin que primero exista un sentimiento de por medio que es propia de la energía roja. Esa energía recorre nuestro cuerpo y se transforma en amarilla, despertando nuestra intuición y nuestra vitalidad hasta que finalmente se transforma en azul y así logramos comprenderla. La respiración al entrar por nuestros sentidos recorre primero el corazón, luego el estómago y finalmente sube a la cabeza para su transformación en energía azul.

________________________

TE INVITAMOS A SUSCRIBIRTE DE FORMA GRATUITA AL BOLETÍN DE GUARDIANA

Recibirás cada 15 días el boletín DESCOMPLÍCATE. Incluye INFORMACIÓN ÚTIL que te ayudará a disminuir el tiempo que empleas para resolver trámites y/o problemas. Lo único que tienes que hacer para recibirlo es suscribirte en el siguiente enlace: https://descomplicate.substack.com/subscribe?

¿Otra vez contra la libertad de expresión?

Noticia Anterior

Libertad de expresión y criminalización del discurso público

Siguiente Noticia

Comentarios

Deja un Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *