0

A menos de dos meses de las elecciones generales, el binomio Evo-Álvaro comete una serie de gigantes errores políticos. Hoy, ni siendo mago se puede pronosticar cuánto afectarán estos al MAS en las urnas. ¿Quiénes asesoran al Presidente?

El Presidente repite desde 2006 en todos sus discursos un libreto contra el imperio. Sus fieles seguidores se lo aprendieron de memoria. Probablemente la cúpula del MAS nunca vio ni encontró otro modo para unificar las filas que poner al frente a un enemigo común: Estados Unidos.

Sin embargo, los incendios en la Chiquitanía no solo han devorado un millón de hectáreas, sino han puesto al descubierto que la administración de Evo Morales ha venido ejecutando una serie de acciones propias del imperio que siempre ha criticado, porque son depredadoras de la Madre Tierra.

El Gobierno aprobó la Ley 741 el 29 de septiembre de 2015, con la que amplió la autorización de desmonte de 5 a 20 hectáreas. Acto seguido, el INRA fue dotando de tierras a colonos campesinos que procedieron a usar fuego para realizar el desmonte como vieron hacer a sus padres y estos a sus abuelos. Hoy son 40 mil colonos los beneficiarios de 50 hectáreas cada uno con el permiso de desmontar 20 por ley.

Por ejemplo, en el municipio de San Rafael de Velasco existían en 2004 unas 16 comunidades y hoy están registradas más de 80, según los datos que maneja la Fundación para la Conservación del Bosque Chiquitano, la mayoría de colonización reciente.

No es la única normativa, el Decreto Supremo 3973 (del 9 de julio de 2019, que modificó el artículo 5 del DS 26075 del 2001) autoriza el desmonte y las quemas controladas inclusive en tierras de producción forestal permanente y no solo en Santa Cruz, sino en el Beni, favoreciendo a empresarios nacionales y extranjeros.

Los medios oficialistas salieron a decir que, en realidad, las quemas y desmontes en Santa Cruz fueron autorizados mediante el Decreto Supremo 26075, norma aprobada por el presidente Jorge Quiroga Ramírez en 2001. Por tanto, el Decreto Supremo 3973, aprobado y suscrito por el presidente Evo Morales, solo modifica esa autorización.

Y el Mandatario alegó al respecto:  "Las pequeñas familias (que) si no chaquean, ¿de qué van a vivir?". Cierto, pero se pudo proceder de otro modo mediante planificación, control y seguimiento, y de cara al país.

Lo correcto hubiese sido que el Gobierno anulara cualquier normativa que atentara contra la Madre Tierra, porque prometió al país y al mundo en foros internacionales cuidarla, no depredarla.

Pero si esos fueron errores políticos grandes y no de palabra, sino de acción, otra metida de pata fue la reacción tardía de la administración de Evo Morales para atender los incendios.

No debió el Presidente decir que la ayuda internacional no era necesaria ni esperar un solo día para anunciar gran desplazamiento para apagar el fuego. Así hubiese parecido que el país le importa más que su campaña política. Los cálculos le fallaron y, a estas alturas, ya son una señal de humo desde las urnas.

¿Quiénes asesoran al Presidente?

¿Qué es género?

Noticia Anterior

Experiencias que iluminan

Siguiente Noticia

Comentarios

Deja un Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *